
La entidad busca formalizar estas fértiles tierras en la vereda Aurora Alta, jurisdicción del municipio cundinamarqués.
Campesinas y campesinos podrán acceder a títulos de propiedad que les brindarán seguridad jurídica y permanencia en el territorio.
Bogotá, 24 de junio de 2025. @AgenciaTierras.
La Agencia Nacional de Tierras —ANT— adelanta una jornada de barrido predial en la vereda Aurora Alta, de La Calera, municipio cundinamarqués que abastece buena parte del mercado de Bogotá con hortalizas, flores, leche y papa. El propósito: avanzar hacia la formalización de alrededor de 200 predios.
“Este proceso es fundamental para que familias rurales de La Calera puedan acceder a la seguridad jurídica que les ha sido negada durante años. No se trata solo de un título, se trata de dignidad, permanencia y garantía de derechos sobre la tierra”, afirmó el coordinador de la ANT en Cundinamarca, Jesús Bayro Muñoz.
Esta acción hace parte del proceso de ordenamiento social de la propiedad rural, una de las principales estrategias del Gobierno del Cambio del presidente Gustavo Petro para garantizar derechos sobre la tierra y transformar el campo colombiano.
La señora Marta Lucía Ortiz, campesina, presidenta de la Junta de Acción Comunal de Aurora Alta y beneficiaria del proceso, expresó su emoción al ver avanzar la jornada y narró que su padre, quien trabajó esa tierra toda su vida, nunca tuvo papeles: “Yo crecí al lado de él, y ahora poder tener un título a mi nombre, será una bendición. Uno siente que por fin lo están mirando”.
Un equipo de profesionales de la entidad recorre el territorio para recolectar información jurídica, topográfica y social de los predios. Esta etapa es clave para emitir títulos de propiedad formal, legalizar ocupaciones históricas y reconocer el arraigo de comunidades campesinas que durante décadas han trabajado la tierra sin respaldo legal.
La Calera ha enfrentado desafíos estructurales como la informalidad en la tenencia de la tierra, la presión del desarrollo urbano, conflictos de uso del suelo, como también secuelas del conflicto armado, que dejaron a familias desplazadas, desprotegidas o sin el acceso pleno a sus derechos.
La Agencia Nacional de Tierras continúa desplegando su presencia institucional en los territorios, garantizando que las comunidades rurales, especialmente aquellas afectadas por la violencia y la exclusión histórica, puedan acceder a la tierra de manera legal, segura y con proyección productiva.