
Un equipo de la Agencia Nacional de Tierras recorrió la Sierra Nevada haciendo microbarridos prediales para titular 1.500 hectáreas a comunidades rurales asentadas históricamente.
Corregimiento de Guachaca, Sierra Nevada de Santa Marta. @AgenciaTierras
La Agencia Nacional de Tierras ─ANT─, a través de su Unidad de Gestión Territorial Caribe, adelantó un proceso de titulación de 1.500 hectáreas en la vereda Quebrada El Sol, corregimiento de Guachaca, un enclave de difícil acceso en la Sierra Nevada de Santa Marta que alberga el asentamiento indígena Mulkwakungui de la etnia Kogui. Un equipo técnico lideró la jornada, que busca formalizar la tenencia de tierras a campesinos, indígenas y comunidades afrodescendientes con décadas de presencia en la zona, pero sin títulos legales.
Microbarridos prediales en zonas estratégicas del Caribe
Durante la intervención territorial, el equipo técnico de la ANT adelantó la estrategia conocida como Microbarrido Predial, una metodología que inicia con la producción de un proceso denominado cartografía social. En este ejercicio se identificaron 35 predios de aproximadamente 1.500 hectáreas, que serán sometidos a revisión técnica y jurídica para avanzar en su titulación a quienes los habitan desde hace entre 10 y 40 años.
“La jornada nos permitió conocer el territorio desde la voz de sus habitantes. Reconstruimos la historia de la ocupación y las dinámicas de uso, lo que nos da herramientas para avanzar en una titulación con justicia social y enfoque étnico”, señaló Patricia Caicedo Omar, asesora de la Dirección General de la ANT.

La actividad tuvo como propósito principal la caracterización predial, punto de partida para la actualización catastral y la planificación del ordenamiento territorial. Este tipo de acciones representan un avance significativo en la misión de cerrar la brecha de informalidad que persiste en zonas rurales apartadas del país.
Los microbarridos prediales permiten agilizar la identificación de predios susceptibles de titulación, facilitar la planeación territorial con datos confiables y brindar seguridad jurídica a poblaciones que históricamente han estado marginadas de los beneficios del Estado.
“Estamos llevando el Estado a territorios invisibilizados. Con este ejercicio en la Sierra Nevada reforzamos nuestro compromiso de garantizar el derecho a la tierra para quienes la habitan y la trabajan con dignidad”, expresó Damián Marañón Romero, director Territorial Caribe de la ANT.
Seguridad jurídica para la justicia rural
La vereda Quebrada El Sol no solo tiene un valor cultural por ser hogar de comunidades indígenas Kogui, sino que también es un reservorio natural y agrícola vital para la región. El proceso de titulación busca proteger estos territorios frente a amenazas como la especulación, el uso inadecuado del suelo o conflictos de tenencia.

Además, el ejercicio de microbarrido permite ordenar el territorio rural de forma participativa y precisa, reconociendo los derechos históricos sobre la tierra, mejorando el acceso a políticas públicas y garantizando la sostenibilidad ambiental de la zona.
Este esfuerzo se enmarca dentro de las acciones que la ANT impulsa en todo el país para avanzar en la formalización de la propiedad rural, contribuir al desarrollo económico local y consolidar la paz territorial desde el reconocimiento del campesinado, los pueblos étnicos y las comunidades rurales como sujetos de derecho.
La Agencia Nacional de Tierras reafirma su misión de promover el acceso, uso y formalización de la tierra como un derecho fundamental y herramienta clave para la equidad, el desarrollo rural y la paz. En cada hectárea titulada hay una historia de lucha, resistencia y esperanza, que hoy se reconoce legalmente y se protege para las próximas generaciones.